El hierro contribuye a la buena oxigenación de la sangre y permite le eliminación del anhídrido carbónico de los tejidos orgánicos.
Ante la falta de la cantidad de glóbulos rojos en la sangre la persona está anémica, se notará la piel pálida y padece cansancio y pérdida de memoria.
El hierro es almacenado en el hígado, en la médula de los huesos y en el brazo. Cuando el hierro se combina con el cobre, el cuerpo le es más fácil retenerlo.
La combinación de hierro y cobre la podemos encontrar en: germen de trigo, trigo integral, soja, maní.
Las principales fuentes de hierro son: yemas de huevos, acelga, espinaca, verduras de hojas verdes, arroz integral, soja, harina de soja, porotos, lentejas, arvejas, ciruelas secas, sandía, levadura de cerveza.